Viaje a Cracovia. Cuaderno de bitácora de la JMJ
25 de julio (Madrid-Verona)
Salimos de Madrid sobre las 10:30 de la mañana cargados de ilusión y con la pilas a tope para disfrutar al máximo de la JMJ. Por delante nos esperaban unas largas horas de autobús. Hicimos una breve parada para comer cerca de Zaragoza, otra parada para merendar en Barcelona y, por último, paramos a cenar en una estación de servicio en Francia. Después de esta parada nos quedaba toda la noche de viaje hasta llegar por la mañana a Verona. En menos de 24 horas íbamos a cruzar dos fronteras a bordo del bus.
26 de julio (Verona-Liubliana)
Sobre las 10 de la mañana llegamos a Verona, en cuya catedral asistimos a Misa. Posteriormente visitamos la ciudad. Comimos unas magníficas pizzas en un restaurante por un módico precio. Después nos volvimos a subir al autobús e hicimos otras 5 horas hasta llegar a Liubliana (Eslovenia) donde llegamos sobre las 8 de la tarde, a una residencia de estudiantes en la cual dormimos.
27 de julio (Liubliana-Viena)
Tras pasar una magnifica noche en la residencia tuvimos Misa en la catedral de Liubliana. Aprovechamos el resto de la mañana para visitar la ciudad y comimos en un Lizarrán que encontramos para nuestra sorpresa. Por la tarde nos volvimos a subir al autobús para llegar a Viena.
28 de julio (Viena-Cracovia)
Pasamos todo el día visitando la ciudad. La verdad es que la mayoría de los de Mizar estábamos ya bastante cansados porque en todas las ciudades que habíamos visitado habíamos andado más de la cuenta. Visitamos todos los monumentos y por la tarde nos subimos al autobús para llegar, por fin, sobre las 12 de la noche, al sitio donde dormiríamos en Cracovia.
29 de julio (Cracovia)
Nos levantamos a las 7:30 tras haber dormido poco y algo mal en un campo de fútbol 11. Para colmo, ducharse fue misión imposible. Después de haber cruzado Europa en autobús no amanecimos con buen pie en nuestro destino. Pero tras la Misa, esta vez con un montón de gente de otros países, repusimos fuerzas con un desayuno tradicional polaco a base de carne, huevos, pasta, yogur y muchas cosas más. Ese día lo dedicamos a visitar Cracovia, donde pudimos disfrutar del ambiente de la JMJ. Comimos unos sándwiches que nos proporcionó la organización y después tuvimos una tertulia con el Prelado del Opus Dei, don Javier Echeverría. Tras la tertulia, pudimos estar a 10 metros del Papa al que nos encontramos en coche cuando nos dirigíamos al Santuario de la Divina Misericordia. Al llegar al Santuario, tras andar durante más de 45 minutos, descubrimos que estaba cerrado. Una vez más habíamos andado más de la cuenta. Fuimos después al Via Crucis pero fue imposible entrar debido a la cantidad de gente. Acabamos el día cenando en un restaurante y volvimos hasta nuestro campamento en tranvía.
30 de julio (Campus de la Misericordia)
Tras pasar nuestra segunda y última noche en el campo de fútbol tuvimos la Misa como el día anterior. Recogimos las maletas y nos subimos al autobús en dirección al Campus de la Misericordia donde sería la vigilia con el Papa. El autobús nos dejo a unas 4 horas del Campus y anduvimos 14 km. El recibimiento de la gente fue increíble: por el camino nos ofrecían agua, comida, chuches… Tras llegar al Campus de la Misericordia algunos nos situamos en nuestra zona y cogimos la mayor superficie posible puesto que no habíamos llegado todos. Ya por la tarde-noche tuvimos la vigilia con el Papa. Todos quedamos muy impresionados de la fuerza de las palabras del Papa y cómo nos animaba a salir de nuestras casas y hacer apostolado, salir de nuestra zona de confort. Tras la vigilia, cenamos y algunos fueron a dormir mientras otros se quedaban jugando a las cartas o se iban a dar un paseo.
31 de julio (Campus de la Misericordia-Brno)
Un sonido por los altavoces nos despertó a todos a las 6 de la mañana. Algunos no entendíamos por qué nos habían despertado a esa hora si la Misa con el Papa era a las 10. Pero bueno, ya que nos habían despertado nos levantamos. Tras tener la Misa con el Papa, donde nos volvió a hablar de no ser cristianos de “sofá”, abandonamos el recinto lo más rápido posible para no acabar en un embudo. Tuvimos suerte, ya que justo al llegar al autobús, tras andar otras 2 horas, empezó a llover. Comimos de bolsas y nos pusimos de camino a Brno. Llegamos por la noche y disfrutamos de un precioso hotel y una agradable cena.
1 de agosto (Brno-Praga)
Después de pasar la noche en Brno pusimos dirección a Praga donde tuvimos la Misa y pasamos el resto del día visitando la ciudad. Esa noche dormimos en el autobús otra vez, aunque esta vez dormimos mucho mejor que a la ida. Algo bueno tenía que tener el cansancio acumulado.
2 de agosto (Lyon-Gerona)
Tras la noche en autobús paramos en Lyon para tener la Misa y nos volvimos a subir al autobús hasta llegar a Gerona por la noche. En Gerona nos esperaba una espectacular cena de pizzas y hamburguesas. También había un montón de refrescos. Esa noche dormimos en el colegio Bel·lloc.
3 de agosto (Gerona-Madrid)
Tras pasar la noche en Gerona tuvimos una Misa en el oratorio del colegio y nos fuimos en dirección a Madrid. Comimos en un Centro Comercial a la altura de Zaragoza y llegamos a Madrid sobre las 7. Acabaron así unos días espectaculares, llenos de risas e ilusión… pero muy cansados.